Un santotomesino debió entregar el vehículo de alta gama a los inspectores municipales, en un control de rutina realizado este jueves por la noche en barrio Candioti.
El feriado del 25 de mayo terminó mal para el conductor de una coupe Ford Mustang Mach 1 color negra, retenida en horas de la medianoche por inspectores municipales que realizaban un control de alcoholemia en las calles de barrio Candioti, en la ciudad de Santa Fe.
Un santotomesino de 34 años, fue interceptado en Alvear y Castellanos, una cuadra al norte de bulevar Gálvez, en la esquina del colegio Adoratrices y al realizar el test de alcoholemia, éste habría dado positivo, motivo por el cual se le impidió continuar circulando y se le labró un acta de infracción.
El operativo, que contaba con presencia policial de la Comisaría 3ra, se complicó cuando el dueño del auto, cuyo precio de mercado supera los 100.000 dólares estadounidenses, se negó a que el coche fuera cinchado por la grúa, como sucede con el corriente de los casos.
Cómo siguió
Finalmente, producto del diálogo entre los involucrados y los servidores públicos, se desestimó el uso de la grúa y se acordó que el traslado al Corralón Municipal lo hiciera un amigo del infractor, acompañado por un policía y escoltado por la guardia urbana.
El vehículo quedó retenido en el depósito municipal que está detrás de la cancha de Unión y por el caso se le dio intervención al Juzgado de Faltas municipal. En tanto, en la Comisaría 3ra. se labró un acta donde consta la actividad desplegada por los uniformados en colaboración con el operativo de control de tránsito.